Caldera de Taburiente: Barranco de las Angustias

15 de agosto de 2005


Destripando el interior de la Caldera


Distancia: 16 km.
Dificultad: media

Que leñazo me he metido, uff mi rodilla, que morada que está...
Hoy los taxistas nos han dejado en Los Brecitos y desde allí hemos iniciado la bajada, al poco hemos visto un grupo un poco numeroso y hemos dicho que eran los de Arawak y hemos empezado a meter caña para evitar encontrarnos con ellos.
Hoy estamos por aquí
Hemos visto barrancos con agua y también como se desprendían piedras, auténticos arroyos de piedras.

Esta flor de frambueso me llamó mucho la atención

Íbamos entre barrancos y arroyos


El Bejenado y en primer plano Roque Idafe


Foto de grupo

Mario y Conchita


Luego hicimos una parada en un arroyo quien quisiera se podía bañar, pero nadie lo hizo, lo que hicimos fue hacernos unas mascarillas de barro, vamos que eramos la atracción de los que por allí pasaban, que risa, fue un momentazo, los guiris nos hacían fotos y todo...

Rafa el guía, nos cogió las cámaras a todas y así pasa que hay un montón de fotos. Luego nos fuimos al centro de interpretación, donde lo más solicitado fue el baño.




Continuamos la marcha hasta una cascada que Rafa llamaba la de "roba-bañadores", porque todo aquel que se ponía debajo le robaba los pantalones, el agua, muy buena, transparente, caliente, vamos una joya y fue precisamente llegando a la cascada donde me pegué el resbalón.
Imágenes de la Cascada del Barranco de las Angustias



Y nos metimos en el agua,

Flor de la zona, no dispongo del nombre, me inclino por alguna variedad de geranio

Tegeniste

Luego a comer, por cierto, se me olvidó la comida, menos mal que Conchita y Mario me la dejaron, que si no... Comimos junto a un gran pino canario


Luego volvimos a ver a unas chicas catalanas que se habían quedado sin agua y Rafa les dio una poca de la suya.



Me volví a resbalar, la bota totalmente empapada, el guía en un momento de la bajada nos preguntó a Teresa y a mí que porque íbamos más rápido que el resto, y la verdad no se que decir.

Barranco de las Angustias


Llegamos tarde a los taxis, pero bebimos agua de una fuente cercana, que rica que estaba.

Nos fuimos a cenar a un restaurante alemán, pescado, merluza, ensalada, vino malvarrosa y helado de fresa y vainilla.

Leyenda:
"Había una pareja de enamorados en Barlovento, él era un pastor, ella una doncella, él como hábil pastor llevaba siempre su garrota para salvar los precipicios y así ver a su novia.
Cuando el la pidió la mano, ella dijo que sería su esposa sólo cuando él fuera capaz de sortear siete de los grandes barrancos, él valiente pastor, aceptó y así delante de su novia empezó a sortearlos todos, pero cuando llegó al último al de las Angustias ya estaba exhausto por el esfuerzo, cuando clavo su vara y descendió nunca más se supo de él.
Desde entonces cada vez que había un entierro, ella se lanzaba hacía el ataúd y lo abría para ver si era su amado porque tenía la esperanza de que el volviera"

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